La rica historia de la Escuela de Bioanálisis de la Universidad Central de
Venezuela está profundamente entrelazada con los desarrollos históricos y
científicos que tuvieron lugar en Venezuela desde finales del siglo XIX hasta
mediados del siglo XX.
En 1895, un grupo de médicos, liderados por el Dr. Santos Dominicci e inspirados
por el Instituto Pasteur de París, fundó el Laboratorio Pasteur en Caracas. Esta
iniciativa no sólo proporcionó servicios a la comunidad, sino que también se
involucró en la investigación científica y la capacitación docente, marcando así
el inicio organizado de los estudios de Bioanálisis en Venezuela.
Para 1906, el Dr. Luis Razetti establece la relación existente entre la medicina y
el laboratorio clínico al expresar: “Pretender separar el laboratorio de la clínica,
es tan absurdo, como querer demostrar que la clínica es el principal factor del
progreso de las ciencias médicas”.
Al mismo tiempo, en 1909, Rafael Rangel ya se encontraba involucrado en
actividades que hoy en día se corresponden con el ejercicio del Bioanálisis,
trabajando en el Laboratorio del Hospital Vargas de Caracas. Durante esta
época, la Comisión de Higiene Pública fue establecida, marcando el inicio de las
instituciones sanitarias en Venezuela y estableciendo las bases para la inclusión
de profesionales no médicos en el equipo de salud.
A medida que la necesidad de profesionales técnicos en el campo del laboratorio
clínico se volvía cada vez más evidente para la salud pública venezolana, en
1945 los laboratorios clínicos del país se organizaron en la Sociedad de Técnicos
Laboratoristas de Venezuela. Esta sociedad, en 1947, solicitó la creación de una
Escuela de Laboratorio Clínico adscrita a la Facultad de Medicina de la U.C.V.,
a cuyos egresados se les otorgaba el título de Laboratorista Clínico.
Los acuerdos resultantes de esta solicitud fueron presentados ante la Comisión
Permanente de Educación Nacional y, finalmente, fueron acogidos por la
Universidad Central de Venezuela.
Así, el 23 de julio de 1949, se inauguró la
Escuela de Laboratoristas Clínicos anexa a la Facultad de Ciencias Médicas,
otorgando el título de Técnico de Laboratorio Clínico. Este fue un momento
crucial, marcando el nacimiento de los estudios universitarios de Bioanálisis en
Venezuela.
Estos eventos históricos no solo establecieron las bases para la educación en
Bioanálisis en Venezuela, sino que también marcaron el comienzo de una
tradición educativa y científica que ha perdurado y evolucionado hasta el día de
hoy en la Escuela de Bioanálisis de la Universidad Central de Venezuela.